Papelón de audio amenazó con empañar el sólido show de The Strokes en Lollapalooza Chile

La presentación de los neoyorkinos comenzó con un error técnico digno de Metallica en los Grammy.

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Por un segundo, las peores pesadillas de los fanáticos de The Strokes se hicieron realidad. Bueno, realmente fueron varios segundos. Una canción entera, de hecho. Había versiones sobre el inestable sonido con el que el grupo estaba presentándose en los Lollapalooza de Sudamérica, pero cuando la banda abrió su set con The Modern Age y el micrófono de Julian Casablancas se negaba a sonar, las expresiones pasaron de confusión a horror a enojo rápidamente.

Para aumentar la tensión, la banda no parecía darse cuenta del error técnico que estaba arruinando el inicio de su esperada presentación. Los acordes del segundo tema, Soma, sonaban por el Parque O'Higgins cuando los neoyorquinos se percataron del problema y recién ahí abortaron misión, poniendo todo el show en pausa.

Después de algunos tensos minutos, la voz de Casablancas por fin salió por los parlantes del escenario, generando aplausos y el alivio de los presentes. The Strokes tuvo la amabilidad de reiniciar todo el show, volviendo a empezar con The Modern Age, pero los problemas no se habían acabado del todo. Pese a que el gran incidente había sido superado, costó que el sonido le hiciera justicia a la sólida presentación que el quinteto estaba dando.

Luego de varios temas en donde se perdían la guitarra rítmica y el bajo, algo hizo click y The Strokes por fin pudo sonar como merecían, dando pie a una segunda mitad del espectáculo que sonó como cañón y le hizo justicia a su reputación como una de las mejores bandas de este siglo y al público que esperó este reencuentro por más de una década.

"Tocamos The Modern Age dos veces esta noche. Lo siento, sigo pensando en eso" dijo Casablancas cerca del final del show. Para fortuna, nosotros ya lo habíamos olvidado. Puedes leer más del concierto de The Strokes en nuestra reseña general de Lollapalooza Chile 2017.